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viernes, 22 de julio de 2016

Pokemones

Ok, el drama de la entrada anterior pasó a la historia contemporánea, quizá vuelva alguna vez, pero al menos no por mucho tiempo. Ahora me ocupa hablar de que estoy obsesionada con Marilyn Monroe. Y se van a reír cuando les diga cómo comenzó esto: con un gif.

Besuqueable fiel

Y bueno, en sí es un rollo mental, y se los voy a platicar porque... ¿por qué no?

Sólo espero que nadie que me conozca encuentre este blog, porque si no... bueno, sería como cuando Regina George le sacó fotocopias al Burn Book y las esparció por la escuela en Mean Girls.

Y sólo para evitar pedos de más en caso de que llegara a pasar lo peor, vamos a ponerle seudónimos a todos (¡Yeeeeeih!).

Bueno, pasa que tengo una amiga que ya no sé más si quiero seguir considerando mi amiga (la vamos a llamar Charizard). ¿Por qué? Bueno, hace poco (y con hace poco me refiero a durante estas mismas vacaciones) hubo una reunión con los amigos de la prepa a la que fui. Ahí estaban varias amigas, entre ellas Charizard y la ex mejor amiga de Charizard, Bulbasaur. Ahora voy a ir un poco al pasado (en navidad) para darle contexto a nuestra historia.

En diciembre del año pasado, hubo otra reunión con los amigos de la prepa. A esa reunión asistió más gente, pero eso no importa mucho. Recuerdo que esa noche Bulbasaur estaba muy callada y a mí me gusta que la gente sea feliz. Me le acerqué y le hice la plática para integrarla, además de que yo tampoco sabía de qué hablar con todos los demás porque, como ahora vivo fuera, no me entero tanto de su mundo. El caso es que Bulbasaur y yo empzamos a platicar y me explicó la razón por la que estaba tan seria. Ella estaba muy decepcionada de Charizard porque la cambiaba a cada rato por nuevos amigos, y cuando éstos la botaban entonces volvía a Bulbasaur para que ella fuera su paño de lágrimas, pero luego encontraba nuevos amigos y la volvía a dejar botada. Charizard últimamente ha tenido un círculo de amigos gay, desde diciembre hasta la fecha ha sido así. Cuando fui durante diciembre, Charizard ahora resultaba que tenía novia. Este tipo de cosas no las juzgo porque cada quien hace lo que quiere, pero lo que sí juzgamos varios (no sólo yo) es que sentíamos que eso de tener novia lo hacía sólo para encajar en su grupo de amigos, aunque igual la novia era tomboy con intensiones de volverse transgénero algún día. Esa noche Bulbasaur me contó sus dolencias con respecto a Charizard, porque Bulbasaur es un muchacha muy sensible y linda (la verdad) y pues sí le importaba aunque estaba tratando de ya no darle importancia. Pasó, y esa noche nos despedimos bonito y así.

De vuelta al presente, en esa reunión que les digo que no tiene mucho tiempo que aconteció, volví a ver a Bulbasaur y yo creo que recordando lo bien que platicamos la última vez, cuando llegó se sentó junto a mí y me saludó muy alegre y me dio un abrazo, a lo cual yo correspondí. Nos pusimos a platicar, le pregunté cómo le iba en su vida ahora y ella me preguntó también a mí. Un rato después de iniciada la plática, le pregunté que si ya estaba mejor con Charizard, y me dijo que eso era ya cosa del pasado, que seguían siendo amigas pero ya más bien por encimita. Y ahí viene lo bueno, me contó un chisme... un Señor Chisme.

Ellas, Bulbasaur y Charizard, comparten el gusto por el K-pop y las coreografías coreanas, y a amabas les gusta bailar, y hace un par de años cuando todavía eran muy buenas amigas formaron un grupo de esto precisamente al cual han llegado nuevos integrantes a través del tiempo. El integrante más reciente del que yo tuve conocimiento (que la verdad no les sigo mucho el hilo por falta de tiempo e interés) es de un chico que, para variar, según no es gay al cual vamos a llamar Totodile.

Ah, olvidé decirles que Charizard ya había terminado con la novia, aunque esta historia la verdad no me la sé, así que no sé cómo pasó ni por qué, aunque todos los que hablan de ella suponen que fue porque se aburrió de que no tenía... ya saben, badajo.

El caso es que ahora Totodile y Charizard se estaban acostando, pero eso no es lo interesante, lo interesante es que Totodile tiene novia, desde hace aproximadamente cuatro años !!!! Y eso no es todo, la novia de Totodile es amiga de Charizard !!!! Y el chisme es ese, pero lo interesante es lo que acontece a cada rato en el facebook de Charizard, que se la pasa publicando cosas como el gif de aquí arriba. Y la novia de Totodile, Chikorita, vive engañada por su "amiga" y su novio.

Y bueno, la verdad me agarré de Marilyn para contarles el chisme, pero sí fue gracias a ese gif que comencé a ver sus películas. Me cagan las indirectas por facebook y la gente cobarde y mentirosa, es por eso que ya no sé si Charizard valga la pena como amistad, en todo caso se supone que yo no sé nada de esto, aunque igual es un secreto a voces. Charizard solita me lo va a contar si es que me habla para salir antes de que terminen estas vacaciones, que la verdad no creo porque ya lo habría hecho. Pero, en el remoto caso de que llegara a ocurrir que sí me lo cuente, le diré de frente todo esto que pienso. Y ojalá recapacite.

Pinche gente.

martes, 19 de julio de 2016

Estoy harta

Hoy intenté hablar con mi mamá, ¿por qué? Porque anoche volvió a salirme con sus groserías y sus pendejadas y yo, por inercia, contesté igual. Así que hoy intenté abordar un tema importante, algo que me aconsejó el papá de un amigo: "Qué tipo de relación quiere mi madre en el futuro conmigo".

Me acerqué y le pregunté, tranquila, eso. Y obviamente no me contestó, empezó a contarme los hechos que acontecieron en CDMX (como si no los supiera yo de antemano), obviamente exagerándolo todo, porque no hay otra forma de llamar al hecho de que me diga "Por Mario y Paco das las nalgas" más que como una exageración. Y la verdad no termino de entender la raíz de sus sentimientos. No vale la pena repetir todo lo que me dijo, pero básicamente me dijo que me ponga a trabajar porque ya no me va a mantener.

Y bueno, la verdad es que soy muy floja y con la escuela, para mí, ya es suficiente carga, así que no sé cómo le voy a hacer. Si meto menos carga académica de la que tenía pensada, voy a acabar la escuela a los 30. Pero al final supongo que nada de eso importa ya, aún así la plática no acabó y no sé si habla en serio. Si lo hace, me voy a tener que ir antes a México para buscar un trabajo en el que me paguen aunque sea 3, 000 pesos para poder pagar la renta y mantenerme, y que esté cerca de mi casa para poder ir caminando o en bicicleta porque si encima debo gastar en transporte de plano no me va a acanzar. Y lo único que sé hacer bien es hablar inglés. Hace como un año me ofrecieron trabajo en un callcenter de gringos, y pagaban 12, 000, el problema es que tenía que estar de tiempo completo ahí. La verdad no tengo idea de lo que voy a hacer si habla en serio, y estoy un poco asustada y quiero llorar y me siento muy sola y atrapada. Supuse que el apoyo de los padres era incondicional hasta que acabara la carrera, y supuse que los padres deberían de ser lo suficientemente maduros como para no quitarte el apoyo simplemente por sus enojos y sus caprichos. No estoy segura de qué es lo justo y de qué no lo es, lo único que sé es que cada día que pasa me quiero alejar más de i madre y sacarla de mi vida, porque sólo me hace daño. Y yo a ella. Y sé que mi actitud tampoco es la mejor, pero si me cuesta tanto cambiarla es precisamente por como se ha portado ella conmigo a lo largo de los años, y por lo que observo con mi abuela.

Siento que me pesa mucho el pecho y que hay un vacío gigantesco delante de mí. Y ya no lo aguanto y sólo quiero dormirme y no despertar hasta que todo se arregle, o de plano no hacerlo. Y no estoy pensando en matarme, obvio que no. Pero ya no sé qué hacer, porque soy una inútil que en la vida no sabe hacer nada, y que se la pasa enamorada disfrutando todo sin ninguna preocupación hasta que llega la hora de los madrazos, que es precisamente el ahora.

Y sé que todo tiene solución, pero me duele que mis sueños, en el tiempo en que los quiero y requiero, dependan tanto de mi madre. Me duele estar en un país en el que hacer lo que quieres cueste el doble o el triple de trabajo que en otros. Me duele la cabeza, me duele el orgullo, me duele el corazón.

Me duele, y estoy harta.

jueves, 7 de julio de 2016

4:28

Hoy no estoy segura de qué me quita el sueño. A veces simplemente no puedo dejar de pensar en personas, personas que conozco y personas que no. Me gustaría saberme más madura (o más sabia), saber que he tomado todas las decisiones correctas incluso aunque en retrospectiva no parezcan las mejores. Quizá sí las más naturales, la mayoría. Una que otra tal vez superó mi naturaleza.

Son extrañas mis madrugadas, generalmente no me molestan. Pero esta madrugada en particular sí me molesta. Como cuando algo te pica, en el centro de la espalda y no te alcanzas a rascar. Quizá tengas un bicho, un piquete, quizá solo te pica sin ninguna razón. Y pasará, en algún momento, pero ahora mismo no tienes ningún tipo de alivio y solo te queda esperar a que se te pase o a que alguien llegue y te ayude a rascarte.

Y sigo sin dejar de darle vueltas a la vida de las personas, y cómo cada pequeña encrucijada nos llevó a todos (sí, incluida yo) a parar en lugares que no imaginamos. A darnos cuenta de que de verdad somos la persona que creíamos ser, y con esto hablo de cosas positivas. O a veces, a toparnos con sorpresas, algunas agradables, otras no tanto, pero siempre asombrosas, en nosotros mismos y en los demás.

Hay que matar a los moscos, si no luego te pican en la espalda.

viernes, 1 de julio de 2016

Sudario de Turín

Tenia ganas de tener esto aquí, porque es un texto que escribí hace 4 años y me gustó mucho en su momento y no quiero que se pierda por allí, así que aquí lo dejo, je.


La tecnología avanzó tanto que un buen día lo lograron. Tomaron una muestra de sangre seca de aquella tela, supuestamente sagrada para revivirlo. No tardaron mucho en tener a un bebé, que creció y se volvió un hombre. Lo interrogaron y pusieron a prueba. Era inteligente, nadie lo negaba... pero, por otro lado ¿era un santo?

Muchos no lo admitieron. Lo increíble es que lo rechazaron los que en él creían.

Así pues, por la paz, lo volvieron a sacrificar.

3

—Tienes tres.

Paco mira a su alrededor sin encontrar a la persona que acababa de decir eso. La noche era oscura y silenciosa, la calle por donde pasaba estaba completamente vacía. Levantó la voz para hacer una pregunta, pero los nervios se tragaron sus palabras. Carraspeó para intentar una segunda vez, tratando de imprimirle seguridad a su tono, sin conseguirlo.

—¿Quién anda ahí?

Una risa macabra fue lo único que consiguió como respuesta. Sudor frío comenzaba a resbalarle por todo el cuerpo.

—¡Esto no es gracioso! —gritó, y se apresuró a la estación del metro. Eran las 10 de la noche.

Al bajar las escaleras en la estación y encontrarse con una multitud de gente considerable esperando el tren, se tranquilizó bastante. Sacó un paquete de clínex de su mochila y con un pañuelo se secó el sudor que le escurría por la cara, aliviado de que el mal momento hubiera terminado, pensando que probablemente había sido alguien queriendo hacerse el gracioso, o quizá filmando un video de bromas para internet.

Llegó el tren y abordó, pasado el momento de susto esa sensación de vacío volvió a apoderarse de él y a embotar sus sentidos. Pensándolo detenidamente no supo por qué se asustó tanto al correr peligro su vida, si tenía ya rato que estaba considerando quitársela él mismo.

—Tres —susurró una voz en su oído. Esta vez no se sobresaltó, quizá porque se sentía seguro en medio de tanta gente, quizá porque había razonado mejor las cosas.

Giró la cabeza para encontrarse con nada. La gente estaba como entumecida, cada persona metida en sus propios pensamientos, sus caras no mostraban emociones. Gente que estaba ahí y a la vez no.
Paco se sintió aún más miserable al ver sus caras y saberse uno más. Su vida estaba tan vacía como sus expresiones.


Salió del metro y se encaminó hacia su departamento, para el cual ahora sólo faltaba recorrer cinco cuadras. Los negocios estaban ya cerrados y las luces y el sonido dentro de las casas y los departamentos lo hacían sentir solo.

—Tres —volvió a escuchar.

—¿Tres qué? —respondió Paco, con fastidio.

Entonces sintió que alguien caminaba a su lado. Giró la cabeza y se topó con un hombre negro de ojos azules, una rara combinación. Se detuvo.

—Tres deseos —soltó una carcajada con una voz tan gruesa y fuerte que inundó toda la calle con su sonido. Unos perros comenzaron a ladrar por aquí y por allá.

Paco lo miró atónito. No sabía cómo reaccionar, estaba completamente pasmado.

—Te voy a conceder tres deseos, Paco.

—¿Cómo sabes mi nombre?

—Yo sé el nombre de toda la gente. Tienes tres, aunque claro, no son gratis. Ya luego te haré llegar la factura.

Incrédulo, Paco intentó atar cabos y adivinar de qué se trataba toda esa escena que estaba viviendo, sin embargo no lograba conjeturar nada. Ese tipo era un desconocido.

—No estoy para bromas, ¿sí?

Reanudó el paso y no escuchó que el tipo lo siguiera, pero de pronto volvió a aparecer delante de él. Paco, atónito, miró detrás de sí y no vio a nadie.

—¿Cómo hiciste eso? —preguntó, pasmado.

—Tres, Paco. No tengo tanto tiempo, tengo cosas que hacer, lo tomas o lo dejas.

—¿Eres algo así como un genio?

—No, yo sí cobro. Lo tomas o lo dejas, no te voy a dar ninguna explicación ahorita —la voz del tipo estaba cargada de un tono de fastidio, sin embargo la sonrisa no se había borrado de su cara. Sacó un habano de algún lugar dentro de su chaqueta, lo encendió y comenzó a fumarlo—. ¿Gustas? —le extendió a Paco el puro.

—No, gracias.

Paco aún estaba anonadado. El tipo miró un reloj que tenía en la muñeca y suspiró.

—Tienes treinta segundos para decidirte. Si no dices nada, desapareceré y nunca volverás a saber de mí.

Paco dejó pasar unos cuantos segundos. El humo del puro impregnó el aire con su fuerte aroma, y pasados unos quince segundos, Paco finalmente respondió.

—Está bien.

El tipo sonrió ampliamente, dejando ver una blanca dentadura que contrastaba fuertemente con el color de su piel.

Le extendió a paco un pedazo de papel que sacó de su chaqueta.

—Escribe aquí tus tres deseos una vez que los hayas pensado bien. Cuando estén los tres ya escritos el papel desaparecerá y los deseos serán concedidos.

Paco tomó el papel y lo miró con sarcasmo, luego alzó la mirada para decirle al tipo que eso tenía que ser una broma, pero obviamente ya había desaparecido.

—¿Qué chingados fue eso…?



Y todavía no sé qué va a pedir Paco, je.